Publicado en Córdoba Cofrade especial cuaresma 2013
Fotografía de Victor Olivencia Castro
De profundis clamavi ad te, Domine. Desde lo profundo te llamo, Señor. Así comienza
el conocido salmo fúnebre 129, y el motete que lo recoge musicalmente, que
habla del alma que clama al Señor desde el abismo, implorando su perdón y
confiando en su infinita Misericordia.
Profundidad teológica
es la que ofrece la densa contundencia de la hermandad del Sepulcro. En la
calle y en cada uno de sus actos, el Santo Sepulcro muestra la profundidad del
sacrificio del Salvador. La profundidad infinita del dolor de su madre. La
profunda convicción en la inmaculada
concepción de la Virgen María. La profunda confianza en la redención a través
de la muerte y posterior resurrección del mismo Dios.
El Santo Sepulcro lo
hace desde la profundidad de cada gesto. Desde la profundidad estética y
litúrgica. Desde la profundidad cofrade. Desde su cruz guiona hasta la
manigueta trasera del bellísimo palio, todo está metódica, profundamente
estudiado para honrar a Jesús y a María en una plástica evangelización. En una
meditación que llega a través de los sentidos y lleva inevitablemente al
espectador a pensar en Dios. A Dios por la belleza. A Dios por el ejemplo. A Dios por el cuidadoso estudio de cada
detalle. A Dios por lo cofrade. A Dios por María. Sin estridencias. Sin
distracciones. Recto hacia Dios por la puerta del Perdón.
El ejemplo del absoluto
silencio y compostura de sus nazarenos de ruán y esparto. Su elegantísimo cortejo,
con un juego de insignias de enorme mérito. La excepcional arquitectura del
túmulo regio que cobija la sagrada
imagen de Jesús, donde cada pieza busca realzar su majestad. Su inspirado paso
de palio, sagrada conversación de la Virgen María con San Juan y Santa María
Magdalena en el que cada elemento, efímero o estructural, es un símbolo y una
plegaria. La cuidada música, de capilla o coral, que no rompe la belleza del
silencio, sino que profundiza en ella. Los singulares altares de cultos, realizados
de verdad Ad maiorem Dei gloriam. El
ejemplar recorrido de la cofradía, pionera en realizar estación de penitencia
en la Santa Iglesia Catedral. Todo con un sentido. Todo para Dios y María. Todo
para conmover el corazón del observador. Cada gesto, cada pieza, cada cirio,
cada flor, es una silenciosa catequesis que la ejemplar hermandad del Santo
Sepulcro presenta cada día del año en su templo, y el Viernes Santo a toda la
ciudad de Córdoba.
No hay comentarios:
Publicar un comentario